Blackjack: los orígenes de este popular juego

Junto con los entretenimientos de pelota, los juegos de cartas son una de las prácticas más antiguas de la humanidad. Si bien su origen no se conoce con exactitud, los estudios indican que los naipes comenzaron a usarse en China, durante el siglo XII principalmente por las mujeres de los harenes como una forma de diversión.





Además de las asiáticas, con el pasar de los años surgieron diversas barajas relacionadas con la región en la cual se utilizaban como la española, la inglesa, la napolitana, la alemana, la francesa y la germano-suiza. Además, nacieron diferentes juegos asociados a cada una de ellas, que comenzaron a implementarse en las salas de apuestas.

Uno de los juegos de casino más conocidos es el blackjack que, si bien posee vigencia en la actualidad, se originó hace miles de años. Conozcamos su historia y sus características.

Los antecesores del blackjack

Los inicios de este popular juego están relacionados con la veintiuna, considerada la precursora del blackjack. Aunque no se tiene precisión sobre su surgimiento, la primera referencia escrita sobre esta práctica se encuentra en la obra Rinconete y Cortadillo, creada por el escritor español Miguel de Cervantes entre 1602 y 1603 en Castilla.

En ese texto, dos personajes que viven en la ciudad de Sevilla aparecen jugando a la veintiuna que se presentan como juego en el cual el objetivo es sumar 21 puntos sin pasarse y en donde el as vale uno u once puntos.

Otro antecesor es el juego ving et un (21, en francés), que se practicaba en el siglo XVII en los primeros casinos de Francia y, así como sucede con el blackjack, tenía como objetivo conseguir 21 puntos.

A pesar de esta similitud, el vingt et un tenía algunas reglas diferentes. Por ejemplo, las apuestas se hacían después de recibir la primera mano y no antes y si el croupier obtenía 21 los jugadores debían triplicar su pago inicial, quedando el pago 3:1.

Así como la veintiuna y el vingt et un, existían juegos parecidos que pueden considerarse precursores del blackjack, como el siete y medio y el treinta y uno en Italia y España, respectivamente.

El surgimiento del blackjack

Tal como sucedió con otros productos culturales, la inmigración europea se encargó de difundir esta práctica por otras tierras. Fue así como el 21 llegó a América de la mano de los colonos franceses que se establecieron en los Estados Unidos durante el siglo XIX, principalmente en Louisiana y Nueva Orleans, conocidas como las capitales de apuestas en ese momento.

Allí el juego cambió su nombre y pasó a llamarse Blackjack porque en los casinos de ese país los premios más grandes se otorgaban a los jugadores que obtenían un as de picas y un jack negro (conocido como jota), es decir un blackjack.

Dado que en los inicios el juego no tenía reglas, el gobierno estadounidense prohibió su práctica en 1980. Sin embargo, debido a que las personas seguían jugando en salas clandestinas, en 1931 el departamento de Nevada decidió legalizarlo nuevamente contribuyendo a su popularización por el resto del territorio local.

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